lunes, 31 de enero de 2011

Bronce para termoimpresión

El otro día, aprovechando que puse en marcha la máquina de termoimpresión para hacer los lápices de Elisa, hice una pequeña prueba que tenía pendiente.
Ya os lo conté aquí, en la postdata, que quería probar a imprimir mis grabados de bronce en caliente.
La termoimpresión, o impresión en caliente, sigue los mismos principios que la impresión tipográfica; la única diferencia es que con la impresión en caliente se deben calentar los tipos o los motivos a imprimir, y en vez de tinta se utiliza cinta transferible.
Aquí podéis ver el grabadito que imprimí y detrás está la cinta usada. No sé si se distingue muy bien: la cinta es plateada —la que utilicé para los lápices de Elisa— y las zonas donde está la ilustración ahora son transparentes; con el calor la película plateada se ha transferido a la superficie a imprimir.

El grabadito
Las cintas
Como no tenía mucho tiempo, y la verdad tampoco tenía muchos materiales a mano, hice pruebas sobre los tres tipos de papel que tengo ahora mismo en el taller (para la próxima tengo que hacer pruebas sobre cuero sin cinta). Donde mejor quedó el grabadito fue en el papel Inuit, que es el más liso y satinado. El papel de algodón en que imprimí las postales no quedó nada bien.

El resultado
¿Véis que el plateado resulta brillante? Bueno, pues para mí esa es la principal diferencia y el principal uso que se le puede dar a la termoimpresión: sirve para imprimir dorados y plateados realmente brillantes. Con las tintas nunca llegas a conseguir un dorado que brille, siempre sale algo tirando a cobrizo. Y el plateado también resulta muy desvaído.

Termoimpresión es el dorado con que los encuadernadores adornan los lomos y las tapas de los libros. Sólo que para estos menesteres, si se trata de encuadernación artesanal, no se utilizan máquinas sino que se hace manualmente. Bueno, y si el libro realmente merece la pena, pues en vez de cinta, se utiliza pan de oro, que es lo suyo.
Umm! a ver si me animo y os enseño las herramientas del encuadernador, que tengo esa sección totalmente abandonada.

P.D.: He actualizado la barra lateral con las recomendaciones de este mes. Espero que os gusten.

viernes, 28 de enero de 2011

Sweet Elisa Talens


Pues eso, con la llegada de la lluvia y el silencio me he metido en el taller. Pero no he puesto en marcha la Barcino, sino la maquinita de termoimpresión. Tenía pendiente hacerle unos lápices a Elisa


¡Y ya están hechos! (Elisa, si lees esto ya sabes que esta semana te llamaré para desayunar).
Si pensabais que yo era lo suficientemente lista como para hacer un gif animado (el que enlaza a mi tienda) pues os habíais equivocado. Elisa lo hizo. Igual que ese logo tan chulo que tengo ;-) 

Cuando hablé con Elisa yo ya tenía mis etiquetas impresas con tipos de plomo; las rectangulares que veis, con tipografía Futura y usando la ligadura de la efe con i. Elisa, que es tan dulce como sus ilustraciones, me presentó varias propuestas. Algunas mucho más creativas y originales que lo que ha acabado siendo el logo, pero yo soy muy cabezota y a la pobre no le dejé mucho margen de maniobra.


La rectangular es la etiqueta pre-Elisa, las redondas son las etiquetas post-Elisa. ¿Bastante mejor, no?
Además de su talento para el diseño gráfico, a mí me parece que Elisa es sobre todo una gran ilustradora.


Su trabajo para la escuela infantil Xicotets me parece maravilloso.
Además, Elisa es co-fundadora de la web Lemonday, un escaparate genial para todos aquellos creadores que necesitan mantenerse activos aunque los encargos no lleguen. Cada mes en Lemonday proponen un tema y el lunes del mes siguiente publican todo lo que han recibido. Los temas son muy variados y van desde la actualidad política o cultural hasta las rutinas de la vida cotidiana (el mes pasado el tema fue "Supermarket").
Echadle un vistazo. ¡Y animaos a participar!

Yo me quedo con la ilustración de Elisa para el tema "Obama premio Nobel".
¿Se puede tener más talento?

Hola lluvia, bienvenido silencio

Estos días atrás he estado trabajando desde casa. En la calle del taller estamos de obras, la van a hacer peatonal. Así que el ruido ha sido un poco insufrible últimamente.


Esto es lo que se veía al abrir la puerta del despacho. El martillo hidráulico (¿se llama así?) estaba dale que te pego. Y la visión desde el taller no era mucho mejor.


Hoy está lloviendo así que no hay nadie trabajando en la calle; he aprovechado para hacer unas cosillas en el taller.
Os lo cuento en la siguiente entrada, que me da no sé qué hablar de una señorita como Elisa al lado de estas máquinas de ruido y destrucción ;-)


jueves, 20 de enero de 2011

Tengo mucho que aprender todavía


Un poco antes de Navidad, como si de un regalo anticipado se tratara, llegaron a mis manos los dos tomos del libro Tecnología tipográfica editado por las Escuelas Profesionales Salesianas en 1950. Si no recuerdo mal, este es el libro con que aprendió Alfredo, mi maestro.


Esta que yo tengo no es exactamente la misma edición con que él estudió, pero me deleita por igual. Por lo que se ve los salesianos tenían mucha fama por preparar muy bien a sus alumnos en sus escuelas profesionales, y también sacaron sus libros sobre los diversos oficios. En las guardas del mío pone que otros títulos de la colección eran: Técnica del arte de imprimir y Manual del encuadernador, dorador y prensista (me tengo que hacer con ellos); Manual del carpintero-ebanista; Manual de sastrería; Tecnología mecánica; Manual de zapatería o Manual del decorador.
Aquí, en mi viejo blog, conté cuando le pedí el libro prestado a Alfredo para estudiar un poco.

Y este tesoro del saber ;-) ¿qué dice en su declaración de intenciones?
Creemos sinceramente realizar obra de positivo valor al lanzar a la publicidad los textos de nuestra enseñanza profesional. No es que desconozcamos la existencia de obras utilísimas, que puedan encauzar al obrero para que se capacite en su profesión y alcance en ella perfección acabada. Pero la mayor parte de estas obras no reúnen las cualidades didácticas necesarias para penetrarse bien de un arte u oficio de un modo racional, lógico y ordenado. [...] La aceptación que estos textos han tenido entre los inteligentes, el haberlos adoptado muchas escuelas como texto y el ver cómo aun pequeños industriales los han pedido para perfeccionarse en el arte que rutinariamente practicaban desde que empuñaron herramientas, son sin duda la mejor garantía de su utilidad.
Las cursivas son mías, no tienen desperdicio por una u otra razón.
Y en las solapas continúa:
Difícil será hallar otro tratado escrito en español, tan completo y de tan positivo valor para el tipógrafo estudioso; esta obra sirve para aprender el oficio en todas sus facetas, ya que cada especialidad se trata con la detención que merece. Un número ingente de tipógrafos formados con esta tecnología y que hoy ocupan honrosos puestos en la industria gráfica, son la prueba más elocuente de cuanto aquí decimos.
Cuanto exige en nuestros días el complejo y bello arte de componer, cuanto ha menester el tipógrafo para salir airoso en los dinámicos tiempos que vivimos, cuanto pide el gusto de hoy día exigente en todo lo que significa novedad y belleza, cuanto pide de los profesionales de la tipografía moderna, se encuentra en los dos tomos que constituyen nuestra Tecnología tipográfica.
En fin, que parece que acerté con la compra :-) ¿Quién no quiere considerarse un "inteligente", un "tipógrafo estudioso", y ocupar un "honroso puesto" y practicar la "tipografía moderna"? Aaah, ¿y quién no quiere alcanzar la "perfección acabada"? ¡Me lo pido!


Efectivamente, los salesianos hablan en su libro de la tipografía moderna. Por si no lo leéis bien, en el pie de la ilustración pone: "Composición de vanguardia hecha sobre eje oblicuo". Y en el texto de esta página hablan de uno de mis libros favoritos La nueva tipografía, de Jan Tschichold.  Lo de "de vanguardia" tampoco tiene desperdicio: ¡quiero ser una tipógrafa de vanguardia! (de la vanguardia de 1928, claro).


...también hablan de Marinetti y los futuristas.
Y con esta ilustración yo ya me derrito.
P.D.: ¿Me pregunto qué será la perfección inacabada? Porque, la verdad, puede que yo esté más interesada en la perfección inacabada que en la acabada.
Ah! y esta entrada es para que no crezca mi ego por los comentarios de la entrada anterior. Gracias ¡con lo que me queda todavía por aprender!




Abstract (sorry, this is the most of me today): I got these second hand books back in November. This is the same book Alfredo (the man who taught me everything I know about letterpress) used to learn himself at school. I was very happy to get my own copy, as I have previously borrowed his books. These books are like a compendium of everything you need to know, from the basic skills to the future trends in typography. Yes, they even talk about my favourite typography book Die neue Typographie, by Jan Tschichold.

jueves, 13 de enero de 2011

Grabados a dos tintas

¡Otra entrada técnica! ¡Agárrense que vienen curvas!

Todo esto hizo falta para imprimir las postales de Merche.

El otro día, redactando mi anterior entrada, se me ocurrió que podía explicaros cómo imprimí las postales de Merche. Bueno, cómo imprimí la postal que va a dos tintas, que lo de las dos tintas tiene más interés.
Hasta que tuve que imprimir la postal de Merche yo no había tenido que enfrentarme a un trabajo a dos tintas que necesitara un registro tan exacto. Es decir, que requiriera que el segundo color se imprimiera exactamente donde le corresponde y no un milímetro más allá de su sitio con respecto al primer color.

Pero empecemos por el principio.

Con las máquinas de impresión tipográfica se imprime con tipos móviles (a mí me gusta lo de móviles aunque se ve que debe decirse tipos movibles) que se unen para formar palabras pero... ¿y las imágenes? Pues las imágenes se han hecho con infinidad de materiales a lo largo de la historia: grabados de madera (xilografías), grabados sobre cobre o bronce (calcografías), grabados sobre piedra (litografías) y grabados sobre linóleo ("linografías"). Todas estas técnicas han sido tradicionalmente manuales y requerían de una gubia o de un buril para transferir al material respectivo la ilustración que previamente habíamos realizado sobre un papel.
Con el tiempo, las fundiciones, además de producir letras, también produjeron imágenes. Primero fueron de bronce (yo os he mostrado algunas de mi colección) y luego con la misma aleación que los tipos. Eran pequeñas ilustraciones que podían servir de recurso para ilustrar muy variados textos. También produjeron orlas y otros adornos.
Más tarde llegaron el grabado y el fotograbado. Luego llegó la plancha de polímeros, que se utiliza muchísimo hoy en día en Estados Unidos.
No me voy a enrollar más porque no soy una experta en la historia de la imprenta. Iré al grano: lo que yo utilicé fueron unos grabados de magnesio. Le pedí a Merche que por favor me enviara sus ilustraciones trazadas, en un JPG o en un TIFF (ella me mandó las dos opciones, claro, ella es así). La ilustración debía tener tintas planas, no medias tintas ni degradados. Y necesitábamos un documento por color, o sea por grabado.
Como si de offset se tratara, hicimos un fotolito de cada plancha.


Y del fotolito por sensibilidad a la luz se transferirá la ilustración al magnesio (también se utiliza el zinc para hacer estas planchas, que creo que es un poco más duro y mejor).
Las planchas pueden tener un grosor variable pero normalmente se utilizan las de 1,75 mm de grosor para imprimir con tipografía.

Plancha de zinc sin montar
¿Por qué 1,75 mm? Porque las planchas se adherirán, con cinta adhesiva de doble cara normalmente, a unas piezas llamadas pisos de tal forma que la altura del piso más la altura de la plancha sumarán la altura de los tipos. 

Esta es la plancha montada sobre el piso
Las planchas más gruesas, de hasta 10 mm, se utilizan generalmente para termoimpresión y a veces para gofrados y hendidos.
Y estas son las dos planchas que me hicieron falta para imprimir la postal a dos tintas.


Imprimí primero la tinta gris. Hice un molde con la ilustración de las ramas y con las líneas de la postal.
Tiré mis 100 ejemplares y alguno más para poder hacer pruebas de registro luego con la segunda tinta.
Cuando hube terminado limpié la máquina de la tinta gris y puse tinta verde (o azul, según los ojos que lo vean). Entonces quité el grabado de las hojas y las líneas de la máquina y coloqué el grabado de los puntos.
Pero ¡oh!, a diferencia del offset, aquí no hay marcas de registro.
El grabado de los puntos no era del mismo tamaño que el de las ramas (gran obstáculo) y aunque yo intenté ponerles un piso del mismo tamaño y alinearlos abajo y a la izquierda cuando los pegué al piso... el truco no funcionó.
Tuve que hacer pruebas y más pruebas, que si mueve aquí una línea y media, que si mueve aquí seis puntos...


Y esto fue lo que pasó. Puntos verdes por todos lados. Hasta que por fin conseguí que cada puntito se imprimiera sobre la hojita correspondiente.

¡Aaaay! qué placer la satisfacción del trabajo bien hecho.
Luego me hice un té y sin que sirviera de precedente subí las piernas sobre la mesa y me dispuse a admirar el resultado.

¿Mucho rollo hoy, no?

Espero que se entienda algo; si no, estoy dispuesta a hacer actualizaciones sobre esta entrada :-) Se atienden dudas en los comentarios ;-)


I realize I am being lazy about translating the contents of the blog. I am sorry. This post is sooo long I get lazier but I will try now to give you some clues about what is going on here today.
I made my first try on a double run print for some postcards I printed back in October. This is the whole process, explained quite thoroughly through the photographs too.
As you can see on the last photo, I had to make a lot of tests before I managed to get the green dots in its place, at the end of every grey leave.
Be patient with me and my English. It makes me happy to know that a few overseas visitors have a glimpse at my little corner of the world.





lunes, 10 de enero de 2011

Sin propósitos todavía

Uf! Ya estamos a día 10 y yo no he hecho mis propósitos del año nuevo. No sé si será porque, la verdad, no he tenido tiempo de pararme a pensar en ello, o porque de tanto imprimir lápices con el lema "2011 es mi año" he acabado por creérmelo y ya, ¿para qué escribir listas ni chorradas?, será mi año sí o sí.
Esto último lo digo un poco en broma, como imaginaréis, pero sí es cierto que he empezado el año tranquila. ¿Hay crisis? Sí. ¿Me afecta? Sí. ¿Tengo dos hijos y una tortuga que mantener? Sí ¿y qué?

Así que empiezo el año sin propósitos especiales y el mundo no temblará.

Pero claro, que no haga listas no quiere decir que no vaya a hacer nada. Por lo pronto he pensado que podía darle un poco más de vida al blog. Hoy añado en la columna de la derecha una lista cambiante con recomendaciones de blogs. Todos los días visito varios blogs, intento no disiparme demasiado y a veces se pasan meses sin que visite este o aquel blog, pero cuando vuelvo tengo ¡ración extra! Intentaré que la selección sea temática, y que cambie cada mes, pero no prometo nada. Ya digo... nada de propósitos para el año nuevo.

Además de la lista de enlaces para que visitéis lo que a mí me gusta visitar. Tengo que dar las gracias a algunas personas por haberse hecho eco de las cosas de Oficio y sobre todo, por haber enviado a Sus Majestades los Reyes Magos de Oriente al almacén para acabar con las existencias de lápices y recoger otras cosillas.

Merche fue la primera que enseñó mi trabajo: aquí y, cuando por fin abrí la tiendita, aquí. Estoy muy contenta con el resultado de las postales que hicimos en colaboración. Era la primera vez que imprimía un grabado a dos tintas en mi taller y no será la última. A ver si en 2011 siguen las colaboraciones. Luego Mer se hizo eco de la entrada de Merche. Paula y Deborah me ayudaron a afrontar la campaña navideña con sus entradas geniales. Y luego están los pajes reales, que quisieron distribuir optimismo y otras cositas estas Navidades: Marta, Zita, Cristina y muchos otros. ¡¡¡Gracias!!!


¿Y qué me trajeron a mí Sus Majestades? Dicen que cuando la vida te da limones hay que hacer limonada. Pues yo pienso que si te da dos hijos en edad de pisar charcos hay que tener botas de agua.