Antes del verano, María me escribió para encargarme un álbum para su boda. Ella tenía bastante claro cómo lo quería: en azul, porque será una boda junto al mar; con unas estrellas y unos puntos suspensivos, que tienen un significado especial para la pareja; con tipografía futura en caja baja sólo; con encuadernación japonesa, porque es el destino de la luna de miel... Así que con unas instrucciones tan claras sólo hicieron falta un par de correos y una llamada telefónica y el diseño estaba claro. La boda aún está por celebrar; será el próximo día 1 de diciembre pero ya os puedo enseñar el resultado.
¡Ah! El álbum es una sorpresa para el novio; esperemos que a Jorge le guste tanto como a María.
El álbum tiene cuatro hojas al principio para las dedicatorias a los novios, y doce hojas más acompañadas de su protección de papel vegetal de 70g para incluir fotos.
Aunque el primer correo que me envió María fue en julio, visto el tiempo que teníamos hasta la boda, decidimos posponer el encargo hasta pasado el verano. Al final, el álbum me pilló con los —ya famosos ;-)— números dorados encima de la mesa y con el álbum envié algo más.
Seguro que al novio también le gusta. Me encanta el diseño tan limpio y en colores agradables. Además las estrella rompen ese aire serio. ¡Me encanta!
ResponderEliminarMe encanta la sutileza de los tonos de los materiales empleados en el albúm. Saludos.
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